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Una batalla legal entre gigantes ha terminado con una victoria inesperada para una pequeña empresa española. Durante años, los perfumes Nike fueron un éxito de ventas en las tiendas de perfumería, llevando a muchos a creer que estaban vinculados a la famosa marca deportiva estadounidense. Sin embargo, la realidad es que la empresa española Nike, fundada en 1929, precedió a su homónima estadounidense en once años.
El nombre de los perfumes, inspirados en Niké, la diosa griega de la victoria, se utilizaba para una línea de productos de higiene personal. Cuando la empresa española intentó colaborar con Nike Inc. en los años 90, la oferta fue rechazada. Como resultado, la empresa española lanzó sus fragancias en 1993 bajo el nombre de “Nike Sports”.
Esto llevó a la multinacional estadounidense a emprender acciones legales, acusando a la empresa española de confundir a los consumidores y aprovecharse de su éxito. Nike Inc. demandó el cierre de la empresa española y la prohibición del uso de la marca. Sin embargo, la empresa española prevaleció, ya que tenía los derechos de la marca “Nike” para su línea de perfumes. Como resultado, continúan vendiendo sus perfumes, aunque se les ha prohibido usar la palabra “Sports”. La historia sirve como un recordatorio de la importancia de la propiedad intelectual y la protección de la marca, incluso para empresas aparentemente pequeñas.
La historia destaca la perseverancia de la empresa española y la complejidad de las disputas legales sobre marcas comerciales. A pesar de la presión de una multinacional, la empresa española logró proteger su negocio y mantener su presencia en el mercado.
