La justicia argentina ha dado un giro significativo en el caso de María Cash, una diseñadora de indumentaria que desapareció el 8 de julio de 2011 en Salta. La detención de Héctor Romero, un camionero de 71 años, ha reavivado las esperanzas de resolver este misterioso asesinato. Romero fue acusado de homicidio calificado por alevosía y se le dictó prisión preventiva tras ser indagado por la jueza federal Mariela Giménez. Según el fiscal Eduardo Villalba, hay suficientes pruebas que incriminan a Romero, quien en varias ocasiones ha cambiado su versión sobre su encuentro con Cash.
En sus declaraciones iniciales, Romero alegó que recogió a Cash en la ruta, pero luego modificó su historia en varias ocasiones, lo que ha generado sospechas sobre su veracidad. Durante la audiencia, se le presentó evidencia en su contra, lo que lo llevó a decidir hablar, aunque mantuvo su inocencia. A pesar de las contradicciones en sus relatos, el fiscal ha indicado que Romero es considerado el principal sospechoso, y se está planificando un rastrillaje en áreas específicas donde podría haber más indicios sobre el paradero de Cash.
La investigación, que estuvo estancada durante años, ha cobrado nuevo impulso gracias a la revisión de testimonios y pruebas que anteriormente habían sido desestimadas. Se espera que la recolección de información adicional lleve a un avance significativo en el caso, que ha capturado la atención del público y de la prensa durante más de una década. Mientras tanto, Romero enfrenta serios cargos que podrían resultar en una larga condena si es hallado culpable. Las autoridades continúan trabajando para esclarecer los hechos y brindar justicia a la familia Cash.
