El icónico músico Lenny Kravitz llegó a Argentina el pasado domingo para presentar su álbum ‘Blue Electric Light’ en el Movistar Arena. Aprovechando su tiempo libre en Buenos Aires, decidió explorar la escena culinaria local, y entre sus elecciones se destacó Chuí, un restaurante vegetariano en Villa Crespo. Kravitz llegó al lugar con un pequeño grupo de seguridad alrededor de las 19:47, donde fue recibido por realizadores y productores. Con una actitud amigable, interactuó con los vecinos y se mostró dispuesto a tomarse fotos con los fans.
En su visita a Chuí, Kravitz optó por un vino blanco de la Patagonia y un tinto ligero de Maimará para acompañar su cena. Como aperitivo, disfrutó de la focaccia de masa madre al horno de leña, pidiendo incluso una segunda porción por su sabor ahumado. También degustó la palta quemada y el queso llanero. Para el plato principal, eligió un ceviche de sandía ahumada junto a un ramillete de gírgolas al fuego. Para finalizar su velada, se animó a probar ‘el Doble Magic’, un brioche con gírgolas y salsa de chiles tatemados.
El equipo de Chuí comentó que el artista se fue ‘feliz y agradecido’, prometiendo regresar. Conocido por su estilo de vida disciplinado, Kravitz prefiere mantener un perfil bajo antes de sus presentaciones. La última vez que se presentó en Argentina fue en 2019 durante el festival Lollapalooza.
El restaurante Chuí ha sido un éxito desde su apertura, atrayendo a unos 500 comensales diarios y ofreciendo un menú basado en ingredientes frescos de diferentes regiones del país. La historia de este local comenzó en un terreno baldío junto a las vías del tren, transformándose en un lugar de referencia dentro de la oferta gastronómica de Buenos Aires. Los socios detrás de este proyecto incluyen a Hernán Buccino, Martín Salomone, Ivo Lepes y Nicolás Kasakoff, quienes decidieron unir fuerzas para crear esta experiencia culinaria.
Recientemente, el restaurante también fue mencionado por la visita del emir de Qatar, quien llegó a la Argentina en un lujoso yate. Se espera que se reúna con figuras políticas en el país, mientras que su yate permanece en el puerto.