El caso de María Cash, quien desapareció en 2011, ha tomado un nuevo giro tras la imputación del camionero Héctor Romero, considerado el último hombre en haber tenido contacto con ella. Esta mañana, fue sometido a indagatoria y acusado de homicidio calificado por alevosía. Las autoridades han confirmado que, según su investigación, María fue asesinada. Romero, el principal sospechoso, inicialmente negó cualquier implicación, pero luego, tras un cuarto intermedio, intentó aclarar sus declaraciones, aunque incurrió en más contradicciones.
María, una diseñadora de 29 años, desapareció el 8 de julio de 2011 en la ruta 9/34, en la provincia de Salta. Desde entonces, su caso ha estado lleno de hipótesis no corroboradas y confusión. La orden de captura para Romero fue emitida por la jueza federal Mariela Giménez, quien, tras la presentación de un dictamen por el fiscal Eduardo Villalba, encontró indicios que ponen en duda la versión del camionero sobre su encuentro con Cash.
La detención de Romero se produjo en la casa de una de sus hijas, en el barrio Pereyra Rozas, y su comportamiento al enfrentar a las fuerzas de seguridad fue considerado extraño, ya que al principio pensaba que su presencia se debía a una notificación judicial. Tras ser informado de la orden de captura, fue llevado a la Delegación Salta de la Policía Federal y más tarde a los juzgados, donde designó a su abogado defensor, Fernando Díaz.
Durante la audiencia, Romero continuó proclamándose inocente y alegó no saber qué había pasado con María. Sin embargo, la evidencia en su contra ha sido significativa. El día de la desaparición, Romero admitió haber recogido a una mujer en la ruta, pero afirmó no haber visto su rostro debido a que su cabello lo cubría. Testigos han contradicho esta versión, afirmando que María llevaba el pelo recogido.
Los investigadores han expresado dudas sobre la veracidad de su relato y apuntan a que sus múltiples versiones solo han confundido el caso. La falta de cooperación de Romero tras la amplia repercusión pública del caso ha incrementado las sospechas en su contra.
Recientemente, se conoció que Romero tuvo una conversación con su hermano David el 8 de julio, el mismo día de la desaparición de María, que ha llamado la atención de los investigadores. En esta charla, David preguntó sobre el ‘quilombo’ generado por la desaparición, lo que sugiere que estaban al tanto de la situación. En la conversación, David aconsejó a su hermano que mantuviera la misma declaración ante cualquier citación.
Este nuevo desarrollo en el caso de María Cash ha reavivado el interés público y ha llevado a una serie de nuevas investigaciones, incluidas intervenciones telefónicas para esclarecer la verdad detrás de su desaparición y asesinato potencial.